viernes, 13 de marzo de 2015

A mí me gustó Assassin's Creed Unity

En mi estreno de la consola PlayStation 4 le di una nueva chance a una saga que, evidentemente, ha ido de más a menos en gran parte de sus aspectos: Assassin's Creed. Esta vez con la entrega Unity, donde Ubisoft nos transporta a la candente Revolución Francesa, y nos pone en la piel de Arno Dorian, un Asesino que se debate entre apoyar el cambio y frenar conspiraciones, todo en aras de la (inexistente, en ese entonces) paz de Francia. Muchas cosas que decir sobre este videojuego, así que vayamos por partes:

"(...) Es un videojuego que se disfruta en prácticamente todas sus aristas".
Antecedentes

La expectativa generada por el AC Unity se basaba en dos pilares: primero, el juego prometía "volver a las raíces" de la saga. Tanto en AC III como en AC IV Black Flag, casi había quedado sepultado el otrora infaltable espíritu de la Hermandad de los Asesinos, algo que fue explotado tremendamente en la saga de Altaïr y Ezio con mucho éxito (sigue siendo inevitable hablar de estos dos monstruos cuando se toca el tema AC). El otro pilar era la innovación: AC Unity prometía explorar nuevas tendencias en lo que se refiere al modo multijugador cooperativo, (la promesa de mejorar gráfica y efectos viene por default tratándose de una consola next gen), ¿habrá cumplido?

Argumento

La historia comienza donde terminó Assassin's Creed Rogue, en el palacio de Versalles. Un niño llamado Arno ve a su padre asesinado en uno de los pasillos del lujoso palacio. Aquel hombre se llamaba Charles Dorian, un Asesino francés que esperaba entonces una reunión con el rey. Quien tomó su vida fue el Templario y ex-Asesino, protagonista del Rogue, Shay Patrick Cormac. Luego de estos sucesos, Arno Dorian fue adoptado y criado por François de la Serre, quien a su vez tenía una hija: Élise, con quien Arno, lejos de cimentar una relación fraternal, desarrollaría un apasionado romance. Cuando Arno alcanzaba la adultez y se mostraba como un joven alegre y aventurero, De la Serre fue asesinado en extrañas circunstancias. Arno fue acusado del crimen e injustamente aprisionado en La Bastilla, donde conoce a Pierre Bellec, un Asesino que estaba preso adrede para investigar unos glifos dentro de las celdas. Bellec descubre que Arno también es capaz de ver esos glifos, lo cual implicaba que tenía la habilidad "vista de águila", típica de los Asesinos. Al revelarle su identidad, Bellec comprende que Arno tenga esas habilidades, pues su padre Charles también era Asesino. Luego lo invita a unirse a la Hermandad de París, donde seguiría un riguroso entrenamiento y pruebas de aptitud. Arno acepta, pues concluye que con ese poder podría dar con el paradero del verdadero asesino de su padre adoptivo. Aprovechando una revuelta, ambos escapan de La Bastilla. La historia Assassin's Creed Unity consiste en develar ese misterio, y finalmente cobrar venganza por François de la Serre, todo esto en el acalorado marco de la Revolución Francesa. Pero hay un pequeño problema: De la Serre era un Templario ─y también Élise─. De ese modo, la trama nos sitúa nuevamente en un cruce de intereses entre ambos bandos.

Élise y Arno, un romance entre una Templaria y un Asesino.
Personajes más resaltantes

Además de Arno Dorian y Élise de la Serre, Assassin's Creed Unity cuenta con una amplia lista de personajes ─ficticios e históricos─ que le dan color al argumento central. Entre ellos tenemos a Honoré Gabriel Riquetti, conocido como el Conde de Mirabeau, quien es el Gran Maestro Asesino que recibe a Arno en la Hermandad, y además un diplomático revolucionario que, desde su trinchera, pugnaba por los acuerdos pacíficos. Incluso creía en las treguas entre Asesinos y Templarios. Otro personaje que cobra relevancia es Donatien Alphonse François de Sade, sí, nada menos que el famoso Marqués de Sade. Arno echa mano de su profundo conocimiento de París y sus políticos más de una vez, haciéndolo un gran aliado en pos de sus objetivos. Maximilien Robespierre y Napoleón Bonaparte también tienen su porción de la torta ─esto, de hecho, ha sido blanco de muchas críticas en Francia, pues mientras gran parte del pueblo galo ve en Robespierre a un héroe, AC Unity resalta su lado vil─. En esta ocasión el gran antagonista sería François Thomas Germain, un reconocido platero que resultó ser el Templario que conspiró contra De la Serre.

Jugabilidad

Llegamos a los parámetros técnicos. En cuanto a la jugabilidad, se hicieron importantes innovaciones: empezando por el parkour, en lo cual el personaje tiene movimientos mucho más vistosos y acrobáticos que en el resto de entregas; el modo de combate, cuyos movimientos son más variados y realistas. La diversidad de armamento, por cierto, es impresionante: podemos elegir entre armas de una mano ─espadas, dagas─, armas pesadas ─hachas, masos─, armas largas ─javalinas─ y un extraño "hacha-rifle" que al menos cumplió su misión de "presentarnos algo novedoso". Se mantienen el uso de pistolas y se vuelve al uso de armaduras para mejorar salud e incrementar otros parámetros, incluyendo otra novedad: el sigilo. Se mantienen también las clásicas herramientas del Asesino: las hojas ocultas y los gases, así como también las armas de lanzar, en esta ocasión llamada "hoja fantasma". Una más: la habilidad de disfrazarnos según las personas de nuestro entorno, aunque en este apartado hay mucho por ajustar. 

En cuanto a las misiones, no solo tenemos las de historia y cooperativas, también tenemos las secundarias con el nombre de "historias de París", con lo cual se aprende muchísimo del marco histórico. A la vez, tenemos las distorsiones Hélix, una forma entretenida de mezclar las épocas e involucrar a Arno en ello. Ahí tendrá que superar diversos obstáculos con el fin de recuperar datos que permitan a los servidores volver a nivelar las épocas. Adrelanina asegurada con esto último.

Más realismo y dinámica en los combates.
Gráfica, banda sonora y sonido

La gráfica es ESPECTACULAR. En esto, como siempre en la saga, Ubisoft se ha lucido. Las texturas, la iluminación, las estructuras ─y la fidelidad en ellas─, el cuidado de cada detalle, cada guiño, todo muy bien logrado. Un detalle importantísimo: Se respeta el atuendo de Arno para las escenas cinemáticas, esto porque la tecnología utilizada para este videojuego permite no separar la secuencia común del desarrollo del juego con las secuencias cinemáticas, todo sigue una misma secuencia, eso es, para mí, ¡plausible!, estaba harto de conseguir el mejor atuendo para mi Asesino y que en las escenas cinemáticas volviera a tener el (simplón) original solo porque ya estaban pre-grabadas. ¡No era pues!

En cuanto al sonido se mantuvo el gran nivel mostrado en AC Rogue. Quizás con una mejor AI de los activos habitantes de la París revolucionaria esto habría tenido un resultado aún más apoteósico. En cuanto a la OST, esta es correcta, acompaña bien lo que se ve en el juego.

Captura hecha desde mi partida. AC Unity tiene una calidad gráfica impresionante.
El modo Multijugador: lo mejor

Sin duda alguna, y fuera de todas las bondades narradas anteriormente, el sistema cooperativo/multijugador/online es lo mejor que está dejando la entrega. Se puede jugar hasta con cuatro jugadores a la vez. A lo largo del juego ─y en toda la extensión del mapa─ nos encontramos con dos tipos de misiones cooperativas, las de combate ─en las que tienes que matar a alguien─ y las de sigilo ─en las que tienes que robar objetos y cuya recompensa depende de si te descubrieron (o cuánto te descubrieron)─; las primeras te premian con "puntos de sincronización", otra innovación del juego, una suerte de dinero exclusivo para adquirir nuevas habilidades como por ejemplo el doble asesinato aéreo y las hojas fantasma venenosas ─sí, en este juego apenas te regalan algo, el progreso cuesta─, mientras que las segundas te premian con el siempre bienvenido dinero. Todas las acciones ejecutadas por Arno, desde descensos controlados hasta asesinatos sigilosos, tienen como recompensa "puntos de la Hermandad", este otro tipo de dinero sirve solo para mejorar el equipo comprado y teñir colores según preferencia de cada uno. Sobre el juego en sí, es altamente adictivo. Una plataforma online muy bien lograda donde no solo nos limitamos a conseguir los objetivos, también tenemos motivación histórica ─y aquí uno de los grandes aciertos de la entrega─ pues estas misiones están directamente relacionadas con los sucesos reales que acontecieron durante la revolución. Así, no solo nos dedicaremos a matar soldaditos "porque sí", sino que apoyaremos en sus causas a personajes como Théroigne de Méricourt, entre otros. Eso sí, como en todo sistema online, la conexión juega un papel muy importante para vivir a plenitud la experiencia. Felizmente casi siempre tuve suerte en eso.

Conclusiones

No se cumplió la expectativa de regresar a las raíces de la saga, más allá de que volvió a tratarse a la Hermandad, volvió a hablarse de sus preceptos, volvió a haber iniciaciones y mentores; todo esto se plasmó como una pantomima de lo hecho anteriormente. Nunca se profundizó en Mirabeau, ni en Bellec, ni en nadie más de la Hermandad; los mentores eran solo bocas que daban órdenes y opiniones, dejando que Arno se encargue del resto cual soldado raso. El argumento, por su parte, si bien no estuvo mal y tuvo giros bastante interesantes, no llegó a cubrir los miles de espacios que dejaba el fabuloso contexto de la Revolución. Era como ver la historia de un chico que buscaba comprar un par de patines en plena catástrofe de Chernobyl, es decir, un plano demasiado personal ─por no decir egoísta y por momentos descontextuado─ dado el suntuoso entorno en el que se desenvolvía la historia. No obstante, tuvo buenos momentos. Casi tantos como los tuvo AC Rogue. Por tanto puedo decir que argumentalmente la saga sigue estancada.

En innovación el juego sí cumplió, y con creces. Haciendo uso del motor gráfico de la PS4 se generaron estructuras fantásticas y escenas de rodaje épico. En la jugabilidad hubo novedades bastante considerables también. Pero las palmas, como comentaba un par de párrafos arriba, se las lleva el modo jugador. Algo que, sin dudas, debe quedar para seguir desarrollando en próximas entregas.

El éxito del modo Multijugador de AC Unity radica en la capacidad de la entrega para relacionar estas misiones con las del modo historia; y ojo, eso no quiere decir que para pasarte el juego necesitarás de la ayuda de otros, significa que en un mismo mapa, y en un mismo momento, puedes desarrollar ambos apartados sin que uno desmerezca al otro. 

El apartado cooperativo es, de lejos, lo mejor del juego.
¿Recomendado?

Por todo esto, Assassin's Creed Unity a mí sí me gustó. Sí, a pesar de que lo tomé con manos temblorosas tras haber leído centenares de comentarios negativos. A pesar de que, al menos al inicio de la historia, estuve algo indispuesto. A pesar de todo ello, logré conservar algo de ilusión como fan de la saga para darme impulso, y luego jugué tratando de analizarlo con cierta objetividad. Y hoy que lo he terminado puedo decir que lo recomiendo. Es un videojuego que se disfruta en prácticamente todas sus aristas.

¿Y los bugs?, el lanzamiento accidentado de la entrega hizo que este tema se hiciera un (mal) sello de la misma, pero a mí no me han tocado más bugs de lo que me ha tocado en el resto de entregas de la saga, así es, los bugs son prácticamente un añadido de Ubisoft, y hay que decirlo con todas sus letras. E incluso sus obras maestras dentro de la saga ─para mí AC Brotherhood y Revelations─ han sufrido de lo mismo. Achacarle esto al AC Unity, más allá de que siempre será imperdonable que haya tantos errores en un juego, me parece más que injusto.

Unity es un buen comienzo de la saga en la next gen, y la historia de Arno puede desarrollarse aún más. Si no lo creen, háganse la siguiente pregunta: ¿en qué momento Arno se cruzará con Shay Patric Cormac, el asesino de su padre biológico? Ah, pues. Espero que pronto.

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